No, no es extraño. Si bien es cierto que muchas recetas que elaboramos cuentan entre sus ingredientes con mantequilla, hay personas que son alérgicas, intolerantes a la lactosa, son veganas o simplemente ¡se nos olvidó subirla al carrito del súper!
Las grasas son muy importantes en las recetas, te vamos a contar los beneficios:
- Suavizan las masas, debilitan el gluten y le dan adherencia a la estructura interna.
- Durante el tiempo de horneado ayudan a penetrar y distribuir el calor entre la masa cruda.
- Potencian el aroma y favorecen el dorado y caramelizado.
- Dan humedad a las masas evitando que se reseque.
- Alarga el periodo de conservación una vez que ya están horneados.
Con frutas trituradas:
Si de recetas dulces se trata, el puré de manzana es ideal y muy buena alternativa. Aporta textura y si la preparas baja en azúcar te dará un resultado bajo en calorías.
Usa la misma cantidad que usarías de mantequilla.
Con yogur natural o quesos frescos:
El yogur es lácteo como la mantequilla, pero menos calorías que esta, al igual que los quesos frescos como el requesón le dan a las recetas una gran textura, úsalos en la misma proporción que está indicada la mantequilla en tu receta.
Por supuesto y no menos importante, con aceite de oliva:
Una excelente solución para usar en la cocina tanto para cocinar, freír y usar en cualquier tipo de recetas. Aporta ácidos grasos saludables a nuestros platos, pero también da una apariencia más brillante después del horneado a panes y cualquier masa horneada.
El tipo principal de grasa en el aceite de oliva es grasa monoinsaturada, la cual puede tener algunos beneficios médicos que la grasa saturada en la mantequilla no tiene.
Sabemos que el aroma de la mantequilla en los postres es insustituible, pero su función sí. Podemos sustituirla sin complicaciones con esta tabla de equivalencias que te va a ayudar a hacerlo sin complicaciones. Consulta aquí nuestra tabla de equivalencias.
También te recomendamos leer nuestro artículo “Aceite de oliva y postres: una combinación que amarás conocer” para saber más sobre los usos y las aplicaciones del aceite de oliva en los postres.
No está de más recordarles que consumir aceite de oliva regularmente podría reducir el riesgo de la enfermedad cardiovascular y mortalidad en las personas con alto riesgo cardiovascular.
La grasa monoinsaturada también ayuda a reducir el colesterol y mejorar el control de azúcar en sangre.
Ya tienes estas opciones a la mano para cocinar. ¡No tengas miedo a sustituir la mantequilla, te va a encantar!
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