Es una gastronomía llena de historia y color, es un tributo al gusto; en ella se encuentran una gran cantidad de saberes compartidos, anécdotas, el paso del tiempo y el amor por la tierra.
Esta riqueza de México se ha abierto paso por el mundo, ha conquistado distintos países y se ha reinventado a través del talento de grandes exponentes de nuestra cultura culinaria, quienes han logrado posicionarse como algunos de los mejores chefs a nivel mundial.
En este blog te compartiremos la historia de los representantes más importantes de nuestra gastronomía.
1. Jorge Vallejo
Jorge ocupa el lugar 47 en el ranking de los 100 mejores chefs del mundo y no es casualidad que se encuentre ahí. La vocación que descubrió en la adolescencia, se transformó en una carrera de éxitos y grandes logros, desde la inauguración de su restaurante Quintonil en Ciudad de México, ha logrado conseguir grandes reconocimientos como formar parte de la lista The World’s 50 Best Restaurants de la revista Restaurant.
2. Ricardo Muñoz Zurita
El maestro de la cocina mexicana, Ricardo es uno de los chefs más importantes de México, no sólo por su gran habilidad dentro de la cocina, sino por su trabajo como investigador que refleja un gran compromiso con rescatar las raíces de la gastronomía mexicana y las cocinas tradicionales. Su libro Diccionario de la Gastronomía Mexicana, es un título vital para aquellos que comienzan su formación dentro del arte culinario. Es autor de: Salsas Mexicanas, Los Chiles Rellenos En México, Verde; En La Cocina Mexicana y Verde, Blanco Y Rojo; En La Cocina Mexicana.
3. Carlos Gaytán
Su historia es una de las más inspiradoras para los jóvenes que comienzan a formarse en la gastronomía, es una clara muestra de que los sueños pueden volverse realidad si tienes la perseverancia y el coraje para seguirlos. Tras emprender la difícil aventura de migrar a Chicago a los 20 años y comenzar en la cocina desde la despensa, pudo abrir su restaurante Mexique, cuyo sabor y magia en cada platillo, lo convirtió en el primer chef mexicano en recibir una estrella Michelin.
4. Karime López
Su historia dentro de la cocina es multicultural, ha plasmado su talento alrededor del mundo en ciudades como París, Copenhague, Lima, Tokio y Florencia. Gracias a su gran labor dentro del famoso restaurante italiano Gucci Osteria, Karime es la primera mexicana en recibir una estrella Michelin, uno de los reconocimientos más importantes dentro del sector.
5. Elena Reygadas
Sus grandes habilidades dentro de la cocina han caminado por el mundo, compartiendo la gran maravilla de nuestra gastronomía, logrando convertirse en un ícono del sabor de México. El nombre de su restaurante Rosetta ha tenido presencia en múltiples ocasiones dentro de la lista Latin America’s 50 Best Restaurants. Panadería Rosetta es una de las más exquisitas de Ciudad de México, dentro de ella, cada día nace el aroma y sabor de la tradicional panadería mexicana.
6. Francisco Molina
El gran representante del sabor de Tlaxcala, en sus platillos, la conexión con la tierra es evidente y su amor por los ingredientes más tradicionales de nuestro México como el maíz, maguey, xoconostle, huauzontles y quelites. El sello de su cocina son los moles y texmoles, respetando la profunda tradición que existe en ellos, pero dándoles una visión contemporánea, siendo un reflejo del México presente.
7. Roberto Solís
Dentro de Néctar, Roberto mantiene viva la cocina yucateca, la reviste de contemporaneidad, la dibuja con vanguardia, pero atesora la gran tradición que hay dentro de ella. Desenvolverse en Inglaterra, Dinamarca y Tokio, le permitió encontrar una visión mucho más amplia de las técnicas culinarias, que plasma en los platillos donde cuenta la historia de Mérida y también su historia.
Las vidas y carreras de estos chefs son tan diversas como los estados de nuestro país, como cada cocina, cada tradición. Es aquí donde entendemos el gran valor de los contrastes de nuestra tierra, porque en él podemos darnos cuenta de las grandes similitudes que existen entre nosotros. Todos los chefs de esta lista comparten un profundo amor por la gastronomía y, sobre todo, el amor por México.