¡No es broma!, el tamal, este tradicional platillo de la gastronomía mexicana y de origen prehispánico, tiene más de 500 variedades a lo largo y ancho del territorio nacional.
¡Nadie se niega ante un buen tamal! Envueltos en hoja de plátano, maíz, maguey o aguacate; preparados al vapor o a la leña, con masa de maíz o arroz, manteca de cerdo, agua o caldo; rellenos de salsa verde o roja, o alguna carne (cerdo, res, pollo, pavo o pato), frutas o vegetales o en sus versiones dulces; sin duda cada interpretación da identidad a una región y nos evoca a la mezcla de culturas que vivió nuestro país.
Considerado el componente infaltable de la dieta T del mexicano, Torta, Taco y Tamal, esta delicia culinaria suele acompañarse de bebidas tradicionales como café, chocolate, atole o champurrado y es muy usual que sean el desayuno perfecto para los mexicanos en mercados, fondas y banquetas. Por supuesto no podemos dejar de mencionar la famosa combinación de masa con masa conocida en la Ciudad de México como «guajolota», la torta de tamal.
Aquí elegimos 10 tipos de tamales para que te animes a probarlos… o a prepararlos
1. Los tradicionales tamales de salsa verde o salsa roja
Los más populares entre quienes habitan en la Ciudad de México. El tamal de salsa verde se prepara con masa de maíz, se rellenan con carne de cerdo o de pollo y la salsa es de tomate verde con chile verde, la diferencia con los rojos es que la salsa es de chile guajillo. Se envuelven con hoja de maíz.
2. Tamales Oaxaqueños
Los famosos del carrito en la Ciudad de México, «Acérquese y pida sus ricos tamales oaxaqueños». Envueltos en hoja de plátano y hoja santa o acuyo, el famoso tamal oaxaqueño se prepara con una fina masa de maíz y se rellena de mole negro o amarillo, salsa roja y carne de cerdo o rajas.
3. Tamales de Piedra
Se llaman así porque se preparan sin manteca, no porque sean duros, al contrario, quedan muy suaves. Tradicionales de los valles centrales, llevan una fina capa de masa de maíz con caldo de frijol y se envuelven en hojas de aguacate.
4. El gran Zacahuil
Típico de la huasteca, Veracruz, San Luis Potosí, Hidalgo y Tamaulipas este tamal tiene la particularidad de tener un tamaño ideal para 50 personas. No hay manera de hacerlo más pequeño. Se sirve en porciones pequeñas y es toda una tradición compartir. La masa de maíz es martajada, lleva además manteca de cerdo y se rellena con carne de cerdo y pollo, la salsa es de chile chino, chile cascabel y diversas especias. Su envoltura es de hojas de plátano y su cocción es en horno de leña. ¡Mmm si que se antoja muchísimo!
5. Tamales Norteños
Empecemos por su envoltura, esta es de totomoxtle – las mismas hojas de maíz, pero secas y quebradizas – que antes deben remojarse en agua durante dos horas para que agarren flexibilidad.
A diferencia del zacahuil, estos tamales son más pequeños que todos los tamales del resto del país, de ahí que sean conocidos en el estado de Nuevo León como tamales dedo, ya que es el tamaño ideal para que se puedan probar todos. Su relleno es de machaca, carne deshebrada o queso asadero y se sazonan con chiles secos. También se consume en Coahuila, Chihuahua y Durango.
6. Mukbil pollo o pibi pollo
No podíamos dejar por fuera a los más famosos de la península de Yucatán. «Muk» es una palabra maya que significa enterrar ya que se cocinan en un molde que se coloca en un horno de tierra tapado y sellado con leña. Se elabora con masa de maíz, manteca de cerdo y caldo de carne. El relleno está compuesto por un guiso de semillas de achiote, comino, pimienta negra, ajo, epazote, chile dulce, cebolla y el infaltable de la zona, el chile habanero.
7. Tamal ranchero
Originario de Veracruz, este tamal se hace con la tradicional masa de maíz aromatizada con hoja santa, su relleno es de carne de cerdo o pollo y se sazonan con el rico sabor del chile morita.
8. Tamales dulces: tamal canario
Salen de lo común, principalmente porque están hechos con harina de arroz y en lugar de manteca de cerdo se les pone mantequilla, leche, huevo, azúcar y pasas. Para intensificar su dulce sabor se les agrega almendra. Son de color amarillo y se envuelven en hojas de maíz. Son originarios de Michoacán y se acompañan con atole o chocolate caliente.
9. Tamales dulces: tamal de uchepos o de elote
Típicos de tierra caliente, Guerrero y Michoacán. Está elaborado con maíz tierno molido y un poco de leche. Su consistencia es muy suave y su sabor es dulce. Se comen solos o con queso fresco y crema para contrastar. Como postre se bañan de leche condensada.
10. Tamales dulces: tamal rosado
Generalmente servidos como postre, la masa lleva piloncillo rallado o azúcar y se pinta de color rosa con colorantes, antiguamente en color se obtenía de la grana cochinilla. La masa lleva manteca de cerdo, agua, piloncillo o azúcar y se le agregan pasitas o trozos de fruta y canela. Se envuelven en hojas de maíz y se cuecen al vapor.
Uno más delicioso y provocativo que otro y eso que solo es una pequeña muestra de la extensa variedad. A partir de este 28 de enero y hasta el 2 de febrero puedes disfrutar de la Feria del Tamal en el Museo Nacional de las Culturas Populares donde habrá una muestra nacional e internacional de este preciado alimento.