Empezar por el plato
Como señala el chef con 2 estrellas Michelin Stefan van Sprang, el plato es siempre un elemento importante a la hora de conseguir un buen emplatado, y dependiendo del tipo de comida que vayas a servir, tienes que saber cuáles elegir. Lo primero que hay que saber es evitar los que tienen demasiados dibujos, ya que la estrella del espectáculo siempre será la comida, y demasiados adornos pueden distraer la atención.
Hay que saber que lo importante es el contenido, no el plato, y afortunadamente, hay varias opciones. Hay que saber elegir el plato más adecuado según la comida que vayamos a servir.
Cómo colocar los alimentos
Como en nuestra vida cotidiana, cuando intentamos hacer varias cosas a la vez, ¡el resultado suele acabar en desastre! Cuando organizamos una cena, nuestros platos son el elemento principal. La mejor práctica es mantener el ingrediente principal como el más visible, y que el resto de ingredientes realcen el plato para ayudar a hacerlo más atractivo visualmente. La atención del comensal debe dirigirse al plato en general, pero debe poder visualizar perfectamente lo que va a comer, y no los "adornos".
Puedes aprender cómo cocina sus platos el chef español Dabiz Muñoz en su DiverXO, 3 estrellas Michelin.
Colores
Como bien sabe Hiroki Yoshitake, el chef con estrella Michelin del restaurante Mifune de Nueva York, los colores siempre ayudan a realzar el concepto de una comida, hay que utilizarlos para llegar al comensal, para que entienda el plato y quede fascinado nada más verlo.
Los ingredientes coloridos siempre harán que la comida destaque más en el plato. Sin embargo, los colores oscuros también ofrecerán un gran contraste si la comida es clara y monocromática.
Por poner algunos ejemplos, el verde ayuda a transmitir frescura, naturaleza y relajación... mientras que el rojo muestra pasión y efusividad y, al igual que el naranja, es un color que estimula el apetito. El negro siempre ha representado la elegancia, pero no hay que exagerar, ya que puede acabar dando una impresión equivocada. El azul, en cambio, tiende a hacer menos apetitosa la comida.
Menos es más en el plato
Como dice el chef Sergio Bastard, del restaurante La Casona del Judío (Santander, España), con una estrella Michelin, a la hora de emplatar siempre hay que tener en cuenta lo que se busca, ya que existen diferentes técnicas para hacerlo (central, rítmica, simétrica, asimétrica, oblicua, en escala...) pero lo importante en todas ellas es que menos, es más.
La estrella principal es siempre la comida, todos los adornos que añadamos sólo tienen la función de realzarla. Si algún elemento que hemos añadido desmerece nuestro plato, estaremos cometiendo un error. Debemos buscar la sencillez. Una salsa bien untada o unas verduras bien cortadas pueden ser alimentos suficientes para dar la elegancia necesaria.